El consumo fuera del hogar (OOH) va avanzando en el camino a la normalidad, tal y como lo demuestran los resultados del sector en 2021 donde, aunque no llega todavía a niveles de 2019 y a pesar del impacto de la variante Ómicron, ha crecido un 23,4% con respecto al año anterior.
Una de las claves para entender este crecimiento es la vacunación masiva de la población, que ha facilitado el consumo fuera del hogar. Por otro lado, se ha recuperado la conveniencia en el hogar, similar a la situación que se vivió en 2020 durante la pandemia. Dicha recuperación del OOH ha provocado, además, la casi estabilización del gran consumo.
No obstante, a pesar de este buen desempeño del OOH, la frecuencia de consumo sigue siendo la gran asignatura pendiente. El gasto por acto, por el contrario, supera al de hace dos años, al alcanzar los 9,2 euros. Este incremento del ticket se traslada al gasto por persona, que ha aumentado un 11% con respecto a 2019.
Por regiones, todas las zonas rondaron el 80% de la recuperación en el último trimestre de 2021, finalizando el año con Madrid a la cabeza, con un índice de mejora del 87%, La velocidad de recuperación ha estado íntimamente ligada con las diferentes normativas y restricciones en hostelería.
En cuanto a las edades, son los targets más seniors (de 50 a 75 años) los que mejor se están recuperando. Por su parte, el relax y el placer se erigen como las principales motivaciones para salir, en detrimento del trabajo
Por otro lado, la hostelería independiente aceleró sus resultados en el último mes del año, alcanzando un porcentaje de recuperación del 78% en el acumulado de 2021. Destacan también las buenas cifras obtenidas por los restaurantes de servicio rápido (QSR), que fueron más resilientes al confinamiento y restricciones, en parte gracias al buen desarrollo que ya tenían del delivery.
El delivery en España llega para quedarse
Otro de los aspectos a tener en cuenta tiene que ver con la propia evolución del mercado, que va acompañada de una transformación en cuanto a plataformas de acceso en cuestión de dos años. El sector está cicatrizando, pero lo está haciendo de una manera diferente a cómo lo conocíamos: las barreras entre canales de compra se difuminan, y las variaciones o acelerones en un cambio de hábitos generado durante 2020 se han convertido en estructurales, y eso lleva irreversiblemente a la necesidad de entender las nuevas dinámicas del mercado.
Sin duda, el delivery es uno de los canales que se ha consolidado con la llegada de la pandemia y que permanecerá entre nosotros. Durante el año pasado, aumentó en 11 puntos su penetración con respecto a 2019, llegando a un acumulado del 44% del total de OOH a final de año. De hecho, los canales que más han desarrollado el delivery son los que se han recuperado mejor.
Los agregadores (Uber Eats, Just Eat, Glovo…) han ayudado a generar hábito de compra en el canal, que ha añadido compradores en todo el mundo; el mayor crecimiento en Europa proviene de los mayores de 50 años, permitiendo así ampliar el perímetro del target de clientes. Tanto es así que tiene un mayor alcance que el ecommerce y casi 4 veces más de actos de compra que el ecommerce de alimentación y bebidas.
Uno de los éxitos que está cosechando el delivery de comida reside en el hecho de que satisface diferentes momentos de demanda, con distintas opciones para cada uno de estos momentos. No obstante, todavía tiene mucho que ganar como el máximo nivel de conveniencia frente a la cocina.
Por su parte, las propuestas de “listo para comer” también han crecido; en concreto un 11% versus 2020. En este sector, Madrid tiene el mayor peso del conjunto de España, seguido de la zona de Levante y Andalucía.